Histología del corazón El corazón se encuentra localizado dentro del saco pericárdico en posición ventral a la faringe y rostral al hígado. A partir de 12-15 días del desarrollo larvario se produce la metamorfosis y todas las vísceras quedan situadas en el flanco derecho (Ribeiro et al.,1999). El corazón está separado por un septo transverso que separa el saco pericárdico de la cavidad abdominal (Figura 31A), y consta de cuatro cavidades a través de las cuales circula continuamente la sangre: seno venoso, aurícula, ventrículo y bulbo arterioso (Figura 31B y C). Separando cada cavidad se observan diferentes válvulas: válvula senoatrial (entre el seno venoso y la aurícula o atrio, Figura 31C), válvula senoventricular (entre la aurícula y el ventrículo, Figura 31D), válvula semilunar (entre el ventrículo y el bulbo arterioso, Figura 31E). Las paredes de todos los compartimentos del corazón están formadas por tres capas: una membrana externa (epicardio), una intermedia (miocardio) y otra interna (endocardio). El epicardio es continuo al saco pericárdico y está constituido por un epitelio simple y una capa de tejido conectivo. El miocardio está constituido por un tejido muscular y el endocardio está formado por un revestimiento endotelial y un débil soporte de tejido conectivo. La aurícula está formada por un delgado epicardio. El miocardio forma una capa compacta y muy evidente de trabéculas musculares en forma de red distendida; entre sus fibras se observan gran cantidad de eritrocitos. El endocardio está constituido por un endotelio que posiblemente mantenga una actividad fagocitaria, ya que se observan acúmulos de pigmentos –macrófagos– como parte del sistema reticuloendotelial, asimismo el endocardio se encuentra apoyado por una fina capa de tejido conectivo (Figura 31D). La válvula atrio-ventricular (Figura 31D) se localiza en la pared ventral de la aurícula y abriéndose al ventrículo. Esta válvula cardíaca está constituida por dos valvas, cada una de ellas formada por una porción de tejido fibroso, revestido en la cara ventricular por una capa endotelial. Las otras dos válvulas presentan las mismas características (Figura 31F). El ventrículo tiene una pared más gruesa que la aurícula y es rico en músculo cardíaco estriado. El epicardio del ventrículo está caracterizado por una fina capa de tejido conectivo. En el miocardio se observa una capa muscular externa compacta y otra interna esponjosa con múltiples trabéculas (Figura 31D). La sangre venosa fluye libremente entre las fibras musculares de la capa esponjosa del miocardio. El ventrículo se abre ventralmente a través de la válvula semilunar al bulbo arterioso (Figura 31E). El bulbo está compuesto por un tejido conectivo elástico y fibras de músculo liso y posee una delgada capa epicárdica y otra endocárdica. Por otra parte, el bulbo se estrecha para formar la vena aortica elástica ventral (Figura 31B).