Buen peón
Buen peón de Godofredo Daireaux Una noche, pidió licencia el hombre para desensillar, y el día siguiente, pronto ya para la marcha, preguntó al patrón si no tendría algún trabajito para él, explicándole que era nativo de la provincia de Córdoba, que se había venido disgustado con la familia, y que buscaba colocación. -¿Qué es lo que sabe hacer? -le preguntó el patrón. -Un poco de todo, señor; entiendo bastante de campo y algo también de agricultura. -¿Cuánto quiere ganar? -Lo que usted disponga, señor. Usted verá mi trabajo. Y Ciriaco se había quedado en la estancia, sin mayor compromiso, sin sueldo fijo, sin saber si lo guardarían o no. El primer día, lo ocuparon en desgranar maíz con una máquina de mano, ayudado por un muchacho, y a la tarde pudo ver el patrón que jamás ningún peón le había llenado tantas bolsas en el día. Y sin embargo, el hombre no parecía muy fuerte; era más bien bajo, delgado, menudito; no metía ruido ni con la...
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