Introducción Este mecanismo es esencial para la dinámica del Derecho, ya que permite adaptar la legislación a los cambios sociales, políticos o culturales, eliminando normas obsoletas o contrarias a nuevos principios constitucionales o legales. La abrogación puede ser expresa, cuando una ley nueva establece textualmente que deroga por completo una anterior, o tácita, cuando surge del conflicto irreconciliable entre una norma nueva y una preexistente, siendo la posterior la que prevalece según el principio lex posterior derogat priori (la ley posterior deroga a la anterior).