Concepción del mundo propia de pueblos muy primitivos, que considera todas las cosas, sucesos y fenómenos como animados (de ahí el nombre alternativo de animatismo) y entroncados en una fuerza impersonal (de ahí el nombre alternativo de dinamismo), y que, para algunos investigadores (R. R. Marett), corresponde en la evolución de la humanidad a un estadio anterior al animismo, que presupone ya un grado superior de capacidad intelectiva. Es una hipótesis, en todo caso, muy puesta en cuestión. Características generales En cierto sentido, es una hipótesis que hace derivar la religión de todos o gran parte de pueblos primitivos de la magia, fundándose en la opinión de que la creencia en el hechicero o chamán es más antigua que la creencia en los espíritus y debe por ello anteceder al animismo, o por lo menos ser coetáneo al chamanismo. Como hipótesis se configura hacia 1890 como reacción a la teoría animística de Edward Burnett Tylor, y a raíz de las observaciones...